martes, marzo 13, 2007

Morgana

El padre odió a la niña con un rencor vetusto.
El hijo se le escurre entre los dedos
como un animalillo inquieto que
rechaza su fantasmal imagen de muerta en vida.
Asfixiada en su infierno --atrapada--
habita un error de lucha inútil.
Extraña en sus días, rara en sus horas, oscura, desnuda.
Ella mastica el plástico amargo de sinsabores y derrotas

10 comentarios:

Anónimo dijo...

Cuánto desgarro habita en las palabras que has escrito. Veo la derrota habitando la mirada de una niña aislada, marginada quizá, extraña a lo que sucede a su alrededor en todo caso. Te produce una amarga sensación de desasosiego, de impotencia, como si todo estuviese ya sentenciado de antemano.
Saludos.

Rufus T. Firefly dijo...

Padre, hijo, fantasmal, muerta, infierno, lucha, oscuridad, denudez... La vida en palabras, una lista de conceptos que estremecen por sí solos, y que organizados, armonizados, en ese texto consiguen poner los pelos de punta. ¿Quién teme a la muerte cuando a veces la vida resulta tan opresiva? Solo somos tejido dotado de organicidad, de movimiento, un aleteo inconstante en un mundo de aparente vitalidad. La derrota de la vida no es la muerte, sino el rechazo, la soledad amarga.
Preciosa inspiración.

josejimenez dijo...

tres dudas, lola...

el salon de actos en el que realizas estas aportaciones culturales, lo reservas a nombre particular tuyo, a nombre de alguna entidad?

a como se paga un tubo de cerveza por murcia?

tu relacion con el mundo de la comunicacion es con papel, ondas o vision?

José Manuel Martínez Sánchez dijo...

Es trágico pero bello. Sí, la estética tiene el poder de convertir en bello lo terrible. Me ha gustado mucho. Besos. JM.

El buzon de mi casa dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Eduardo Z. dijo...

Que tal, muy agradable tu blog y entregado, eso se percibe... recibe un saludo y una invitación a dar un paseo por mi espacio.

Hasta pronto!

Alma dijo...

A veces, sin dejar de crecer, para sumirse en un mundo difícil de comprender y sin ser comprendida.

DTB

Anónimo dijo...

Un saludo, Lola. Tu invitación me sirvió para estructurar mucho de mi ignorancia sobre los blogs. Nunca lo había hecho. Y gracias, sobre todo, por darme la oportunidad de compartir mesa con Yayo. Has sido la vanguardia cultural en Murcia, Sabina incluido, no por los invitados, sino por tu idea de darles carta de naturaleza a los blogs.
Mucho ánimo.

El Fantasma de la Opera dijo...

¿Y qué fue de Morgana, la gran dama oscura de las leyendas artúricas? Mujeres con caracter: silenciosa indiferencia de una historia escrita por hombres.

MORGANA dijo...

Cuántas mujeres se sienten así¡¡¡
afixiadas en muchos casos hasta la muerte.
Me gusto, muchos besos.